Cataluña será la Región Mundial de la Gastronomía en 2025. Se convertirá, de este modo, en la primera región europea que recibe esta distinción.
La Región Mundial de la Gastronomía es una iniciativa impulsada por el Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT), una oportunidad extraordinaria para reforzar las sinergias entre las administraciones y los sectores implicados, poner más en valor todo el patrimonio y tejido agroalimentario y culinario catalán, y promoverlo tanto en el ámbito local como internacional.
Cataluña es referente en excelencia alimentaria y gastronómica, adalid en turismo enogastronòmic. Cataluña tiene una cocina que habla de historia, de paisajes, de la gente que los habita, de sus costumbres, de vida, de presente y de futuro. Por este motivo, esta iniciativa persigue los siguientes objetivos:
- Territorio: promover el patrimonio vinculado a la gastronomía y los paisajes agroalimentarios, fomentando su sostenibilidad social, medioambiental y económica que los hace posibles, así como las grandes rutas de país que contribuyan a la cohesión y dinamización del conjunto del territorio.
- Tradición: promover la cocina catalana, desde la tradición y la innovación como uno de los elementos de singularidad e identidad de nuestro país y a la vez de contribución al mundo, poniendo en valor nuestro sistema alimentario asociado a la gran diversidad y riqueza de productos, a la calidad, la responsabilidad y la variedad de paisajes que lo configuran.
- Identidad: promover un relato poniendo en valor toda la cadena, desde el campesinado, los pescadores, el conjunto del sector productor y los productos locales hasta las cocineras y cocineros, restaurantes, emrcats, escuelas... reconociendo los disparos propios y singulares y que conforman la aportación de la gastronomía catalana al mundo.
- Turismo regenerativo: apostar por un cambio de modelo hacia un turismo enogastronòmic regenerativo y de calidad, que aporte valor en la comunidad, asociado a un modelo de producción agroalimentaria arraigado y comprometido con el territorio y, por lo tanto, un nuevo modelo económico que sea respetuoso tanto con la comunidad como con la cultura y el entorno natural que lo acoge.
- Cultura: trabajar eprquè los ciudadanos y ciudadanas de Cataluña acontezcamos los prescriptores y consumidores de los productos que se los da su tierra y el Mar Mediterráneo, a través del esfuerzo de campesinos y campesinas, pescadores, artesanos alimentarios, etc.
- Internacionalización: promover la profesionalización del sector para continuar en el camino de internacionalización y de apertura al mundo, desde nuestros productos, platos y maneras de cocinar y disfrutar de los alimentos.
- Innovación: impulsar el trabajo conjunto entre los organismos públicos y los actores de la cadena de valor hacia la competitividad del producto.
- Sostenibilidad: fomentar la economía circular, promoviendo un modelo de producción y condum que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar, alargando el ciclo de vida de los productos. Por lo tanto, combatir el derroche alimentario.
- Excelencia: continuar con la revolución gastronómica, con nuevas formas innovadoras de experiencia gastronómica.
- Compromís social: velar por la salud y el bienestar de las personas, también y especialmente a través de la alimentación.
En esta línea, por lo tanto, en FECIC hemos decidido adherirnos a la iniciativa, sumándonos así a partir de ahora al conjunto de actuaciones que se harán a lo largo del 2025.